La mayoría de las personas presta más atención a la piel del rostro que a la del cuello y el escote. Es un área que suele estar a la vista, pero a menudo se olvida. Como sucede con la piel del resto del cuerpo, descuidar la zona del cuello y el escote la deja a merced del sol y otros agentes nocivos, ocasionando la aparición de arrugas prematuras, manchas, flacidez y otros problemas. Esto daña su apariencia y su salud. No importa cuánto empeño se le ponga al cuidado del rostro: si se ignora el cuidado que merece la zona del cuello y del escote, el look completo estará arruinado por su aspecto agrietado, envejecido, flácido y lleno de arrugas.

 

El tono muscular es, también, un aspecto que se descuida. El platisma o músculo cutáneo es un músculo dual que va desde la cara hasta la clavícula, recorriendo ambos lados del cuello. Su función es dar movimiento a la mandíbula y la parte inferior del rostro; por tal motivo, a pesar de encontrarse en el área cervical, es considerado uno de los músculos faciales. La pérdida de tonicidad del platisma se traduce en flacidez en la línea de la mandíbula y en el cuello.

El envejecimiento es un proceso natural, progresivo e imparable; no obstante, no prestar atención y cuidado a esta zona e ignorar las arrugas de cuello y el escote anticipa y acelera dicho proceso e intensifica sus efectos. Peor aún: descuidar esta área puede derivar en trastornos que ponen en riesgo la salud de la persona. Entonces, combatir y minimizar los signos de envejecimiento y, sobre todo, evitar su aparición precoz, implica brindar a la piel del cuello y escote el mismo trato que le prodigamos al rostro. Y más.

Habiendo entendido que no hay que descuidar esta área, tan olvidada como expuesta, es momento de prestarle más atención. Desde ejercicios para la flacidez del cuello, hasta tratamientos intensivos para evitar la aparición de arrugas en el cuello joven, hay técnicas, productos, tratamientos y recursos que se pueden emplear si deseamos que la zona luzca tonificada, sana y en armonía con un rostro al que se le brindan todos los mimos. ¿Qué se puede hacer? Cosas como las siguientes:

1. Limpiar con delicadeza. La piel de esta zona es fina y delicada, así que se debe evitar restregar al limpiarla o al secar con una toalla. Los jabones y limpiadores agresivos pueden destruir el fino manto lipídico que la protege y provocar flacidez en el cuello; además, la fricción implica una ligera (pero frecuente) exfoliación de las capas epiteliales superficiales, lo que causa irritaciones y afecta el proceso de regeneración celular. Lo ideal es aplicar un limpiador que sea gentil y respete el PH de la piel.

2. Evitar la excesiva exposición al sol. Con moderación, el sol aporta beneficios y da un tono saludable a la piel. Pero en exceso, la deteriora. Genera manchas, arrugas y representa un riesgo para la salud, pues está asociado a ciertos tipos de cáncer. Aplicar protector solar sobre el cuello y escote, tanto como en cualquier otra zona expuesta, es una precaución inteligente. Lo mejor es elegir protectores solares de FPS 50 que ofrezcan protección UV de amplio espectro.

3. Utilizar cremas y productos que contengan ácido hialurónico. Se ha comprobado que el ácido hialurónico es una sustancia que posee la capacidad de quitar arrugas del cuello, o al menos, reducirlas. También mejora la hidratación de la piel y contribuye a su firmeza y elasticidad, brindándole al escote y cuello una apariencia más firme y joven. Elegir un producto que contenga, al mismo tiempo, ácido hialurónico y ofrezca protección UV: todo un acierto. Te recomendamos Agua Solar Protectora SPF 30 - Hidratación de Vichy, que reúne todas estas condiciones.

4. Incorporar antioxidantes a la rutina de belleza. Los antioxidantes protegen la piel y pueden revertir el daño ocasionado por los radicales libres. Aplicar vitaminas A y C, de forma tópica mediante el uso de ampollas, serums y cremas específicas, así como ingerir alimentos ricos en antioxidantes, es una forma eficaz de eliminar arrugas del escote y reafirmar el cuello. Puedes probar la crema Collagen Specialist de Vichy.

No hay forma de detener el paso del tiempo, pero se puede intervenir para controlar sus efectos; o cuando menos, se pueden realizar ciertas acciones y tomar las precauciones y medidas que permitan disfrutar de una piel saludable y hermosa, a pesar de los años.

Prevenir los daños causados por el sol y otros factores nocivos, así como impedir el envejecimiento anticipado de la piel es posible si se toma conciencia de la importancia de su cuidado en todo momento. Evitar la pérdida de tonicidad muscular recurriendo a ejercicios específicos, cuidar y nutrir adecuadamente la piel del cuello y el escote, protegerla del sol y los elementos, es la clave para que permanezca en forma y luzca tersa, luminosa y sin arrugas durante mucho, mucho tiempo.